MIÉRCOLES, 12 de septiembre de 2018 (HealthDay News) -- La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU. afirmó que el uso de cigarrillos electrónicos es una epidemia entre los adolescentes, y anunció el miércoles unas enérgicas medidas contra la venta del Juul y de otros dispositivos de cigarrillos electrónicos a los menores de edad.
Se enviaron más de 1,200 cartas de advertencia y multas a minoristas y a cinco importantes fabricantes de cigarrillos electrónicos que vendían ilegalmente los Juul, que parecen memorias USB de computadora, y otros productos de cigarrillos electrónicos a menores de edad. Las compañías tienen 60 días para crear planes para detener esas ventas, o la FDA podría considerar una prohibición de la venta de todos los productos de cigarrillos electrónicos con sabores, señaló la agencia.
"La trayectoria preocupante y creciente que vemos en los jóvenes y el camino resultante a la adicción deben acabar", enfatizó en una conferencia de prensa matutina el comisionado de la FDA, el Dr. Scott Gottlieb. "Estamos pensando seriamente en un cambio de política que llevaría a la salida de esos productos con sabores del mercado".
Los fabricantes de las cinco marcas de cigarrillos electrónicos más vendidas han recibido cartas de advertencia de la FDA, apuntó. Todas esas marcas (JUUL, Vuse, MarkTen, blu e-cigs, y Logic) conformaban la mayoría de productos vendidos a menores de edad de forma ilegal, según la agencia. Los minoristas a los que se dirigió la FDA incluyen a tiendas de 7-Eleven, de Circle K y estaciones de servicio Shell.
Además, el plan de la agencia incluye una serie de medidas para detener el uso de productos de tabaco entre los jóvenes, en particular de los cigarrillos electrónicos. Más de 2 millones de estudiantes de escuela intermedia y secundaria eran usuarios regulares de cigarrillos electrónicos el año pasado, según la FDA.
"Nuestros planes de prevención del tabaquismo en los jóvenes se enfocan en tres estrategias clave", dijo Gottlieb. "Primero, restringir el acceso de los jóvenes a los productos de tabaco. Segundo, controlar el mercadeo de los productos de tabaco dirigido a los jóvenes. Y por último, educar a los adolescentes sobre los peligros de utilizar cualquier producto relacionado con el tabaco".
Aunque Gottlieb cree que los cigarrillos electrónicos pueden ayudar a algunos adultos a dejar de fumar cigarrillos tradicionales, le preocupa que los cigarrillos electrónicos planteen riesgos para la salud, entre ellos la posibilidad de liberar unos niveles más altos de nicotina que los cigarrillos tradicionales, y que pudieran conducir a la adicción a la nicotina en los adolescentes.
La nicotina no es una sustancia benigna, dijo Gottlieb. El cerebro adolescente en desarrollo es particularmente vulnerable a la adicción a la nicotina, anotó.
"La FDA no tolerará que toda una generación de jóvenes se vuelva adicta a la nicotina como el precio por permitir a los adultos tener un acceso sin restricciones a esos mismos productos", enfatizó.
Gottlieb dijo que se ha dado a los fabricantes de cigarrillos electrónicos bastante tiempo para cambiar sus prácticas.
"He advertido a la industria de los cigarrillos electrónicos durante más de un año que deben hacer mucho más por controlar esas tendencias en los jóvenes", aseguró.
"En mi opinión, trataron esos temas como problemas de relaciones públicas en lugar de pensar en serio sobre sus obligaciones legales, el mandato de salud pública y la amenaza existencial de esos productos, y como lo hicieron, esos riesgos se han acumulado", lamentó Gottlieb.
Y algunos de los minoristas que recibieron cartas de advertencia siguen publicitando y vendiendo esos productos, apuntó.
Un fabricante en el punto de mira de la FDA, Juul Labs, dijo en una declaración que "JUUL Labs trabajará de forma proactiva con la FDA en respuesta a su solicitud. Estamos comprometidos con prevenir que los menores de edad utilicen nuestro producto, y deseamos ser parte de la solución para mantener los cigarrillos electrónicos fuera de las manos de los jóvenes".
La FDA dijo que también investiga si los fabricantes de cigarrillos electrónicos han introducido productos nuevos tras el 8 de agosto de 2016, sin una autorización previa al mercadeo.
La agencia dijo que sigue supervisando a las tiendas minoristas que venden tabaco, para garantizar que cumplan las leyes federales.
Las medidas anunciadas el miércoles son solo los elementos iniciales de estos nuevos esfuerzos, añadió Gottlieb.
Los fabricantes dicen que han cambiado desde la época de Joe Camel, apuntó.
"Pero miren lo que sucede ahora mismo. Bajo nuestra vigilancia, y bajo su vigilancia. Deben demostrar que realmente están comprometidos con mantener estos nuevos productos fuera de las manos de los niños, y deben encontrar una forma de revertir esta tendencia", planteó Gottlieb.
Más información
Para más información sobre los cigarrillos electrónicos, visite el Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas de EE. UU.
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