Los desfibriladores quizá no ayuden a los pacientes con problemas renales y cardiacos

listening to heartbeat
listening to heartbeat

MIÉRCOLES, 7 de febrero de 2018 (HealthDay News) -- Las personas con una enfermedad renal crónica con frecuencia desarrollan insuficiencia cardiaca, lo que conduce a que les implanten un desfibrilador cardiaco para controlar su ritmo cardiaco irregular.

Pero, según un estudio, esto no carece de riesgos.

Las probabilidades de ser hospitalizado por insuficiencia cardiaca eran un 49 por ciento más altas para los pacientes con enfermedad renal que tenían un desfibrilador implantado que para los que no tenían el dispositivo, según el estudio realizado por investigadores de Kaiser Permanente y la Universidad de Washington.

La hospitalización por cualquier causa fue un 25 por ciento más alta para los que tenían el desfibrilador que para los que no.

"El hallazgo nos sorprendió", comentó la autora principal, la Dra. Nisha Bansal, del Instituto de Investigación Renal de la universidad.

Además, el estudio básicamente no encontró ninguna diferencia en las tasas de mortalidad entre los participantes del estudio que tenían un desfibrilador implantado y los que no.

"La enfermedad renal crónica es habitual en los adultos con insuficiencia cardiaca, y se asocia con un riesgo más alto de ataque cardiaco", dijo Bansal en un comunicado de prensa de Kaiser Permanente.

"Pero en este estudio observacional no encontramos un beneficio general significativo de los DCI [desfibriladores cardioversores implantables] para los pacientes con enfermedad renal", lamentó.

Aproximadamente el 14 por ciento de los adultos estadounidenses tienen un enfermedad renal crónica, y la insuficiencia cardiaca es su causa principal de mortalidad, según los investigadores. Aproximadamente el 30 por ciento de los 5.7 millones de adultos estadounidenses con insuficiencia cardiaca también tienen enfermedad renal crónica.

Un desfibrilador implantado es un pequeño dispositivo que administra un choque eléctrico al corazón para ayudar a controlar los latidos cardiacos irregulares. Es distinto de un marcapasos, que trata problemas del ritmo cardiaco menos peligrosos.

Otros estudios han mostrado que los desfibriladores implantados reducen el riesgo de muerte cardiaca súbita para las personas con insuficiencia cardiaca y mejoran también su supervivencia general.

"Los datos de nuestro estudio sin duda deben confirmarse en ensayos clínicos realizados específicamente con pacientes con enfermedad renal crónica", indicó el autor principal, el Dr. Alan Go, científico investigador en Kaiser Permanente del norte de California.

El estudio incluyó a más de 5,800 adultos estadounidenses con enfermedad renal crónica e insuficiencia cardiaca. Más de 1,500 tenían un DCI.

"Dado que colocar un DCI puede ser caro y puede provocar otras complicaciones, resulta crítico comprender mejor cómo usar esta terapia del mejor modo en los pacientes con un riesgo alto, como por ejemplo los que tienen una enfermedad renal crónica", dijo Go.

"Basándonos en nuestros resultados", añadió, "los profesionales clínicos deberían sopesar con cuidado los riesgos y los beneficios de los DCI cuando se recomienden para este subgrupo de pacientes".

Los resultados aparecen en la edición en línea del 5 de febrero de la revista JAMA Internal Medicine.

Más información

El Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de EE. UU. tiene más información sobre los DCI.


Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

© Derechos de autor 2018, HealthDay

logo

Related Stories

No stories found.
logo
Healthday Spanish
spanish.healthday.com