MIÉRCOLES, 28 de agosto de 2019 (HealthDay News) -- El peligro para los pulmones de los adolescentes que representan los cigarrillos electrónicos no solo ocurre entre los que vapean. Un nuevo informe encuentra que muchos jóvenes que están presentes [mientras otros usan cigarrillos electrónicos] están respirando "vapores" de segunda mano.
Los investigadores analizaron datos de la Encuesta nacional de tabaquismo infantil de EE. UU., y encontraron que alrededor de un tercio de los estudiantes de escuela intermedia y secundaria se expusieron a aerosoles de vapeo en 2018.
Se trata de un aumento de alrededor de un 30 por ciento respecto a la prevalencia entre 2015 y 2017, cuando más o menos uno de cada cuatro jóvenes inhalaba vapores de cigarrillos electrónicos de segunda mano.
Esta tendencia es "preocupante", debido a que los cigarrillos electrónicos liberan una variedad de compuestos químicos posiblemente peligrosos, señaló el autor para la correspondencia, Andy Tan. Esos compuestos incluyen a la nicotina, metales pesados, aldehídos, glicerina y sustancias saborizantes, explicó.
"La mayoría de los estudios han concluido que la exposición pasiva podría plantear un riesgo de salud para los que están presentes, sobre todo poblaciones vulnerables como los niños y los adolescentes", advirtió Tan. Tan es investigador en el Centro de Investigación Basada en la Comunidad del Instituto Oncológico Dana-Farber, en Boston.
Los investigadores anotaron que la tasa a la que los estadounidenses jóvenes inhalan los vapores de los cigarrillos electrónicos de otras personas está en aumento a pesar del hecho de que 16 estados y más de 800 municipios han introducido recientemente leyes que restringen el uso de los cigarrillos electrónicos en muchos lugares, incluyendo a las escuelas.
Gran parte de la exposición de segunda mano ocurre al vivir con o estar cerca de personas que usan cigarrillos electrónicos, según el equipo de Tan. El informe se publicó en la edición en línea del 28 de agosto de la revista JAMA Network Open.
Dos expertos que no participaron en el estudio se mostraron de acuerdo en que hay motivos reales para preocuparse por la salud de los adolescentes.
"Los peligros del humo de cigarrillo de segunda mano se han descrito bien en los últimos años, así que no resulta sorprendente que el 'humo' de segunda mano del vapeo también pudiera provocar daños", señaló el Dr. Len Horovitz, especialista pulmonar en el Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York.
Apuntó que en algunos jóvenes que están presentes [cuando otros vapean] "las reacciones asmáticas son comunes, y con la tendencia en aumento de vapeo y cigarrillos electrónicos, esto se ha convertido en un peligro de salud pública".
Patricia Folan dirige el Centro de Control del Tabaco de Northwell Health en Great Neck, Nueva York. Dijo que "la alta concentración de partículas ultrafinas en el aerosol puede agravar los síntomas respiratorios y provocar una constricción de los vasos sanguíneos. Debido a la composición química del aerosol de los dispositivos de cigarrillos electrónicos, los que se exponen pueden experimentar irritación de los ojos, la garganta y las vías respiratorias. La investigación también ha indicado que la exposición al aerosol de los cigarrillos electrónicos con sabores podría provocar daños y enfermedades en los pulmones".
El estudio también encontró que la amenaza del humo de segunda mano de los cigarrillos tradicionales de tabaco tampoco ha desaparecido. Más o menos la mitad de los estudiantes encuestados reportaron exposición al humo de tabaco de segunda mano, que es mucho más peligroso que los aerosoles de los cigarrillos electrónicos, advirtió Tan.
"Debemos asegurarnos de que la reducción de la exposición al humo de segunda mano siga teniendo prioridad en la agenda, junto con políticas para proteger a los jóvenes de todas las formas de exposiciones de segunda mano", añadió Tan en un comunicado de prensa del Dana-Farber.
Más información
El Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas de EE. UU. ofrece más información sobre los cigarrillos electrónicos.
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