Un estudio pone en duda el uso de unos medicamentos comunes para la insuficiencia cardiaca

patient entering ambulance
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JUEVES, 5 de diciembre de 2019 (HealthDay News) -- Millones de estadounidenses con insuficiencia cardiaca toman un medicamento de la familia de los betabloqueantes para ayudar a aliviar la afección. Pero, en muchos casos, ¿podrían los fármacos hacer más mal que bien?

Un nuevo estudio encontró que tomar betabloqueantes se asociaba con un aumento en el riesgo de hospitalización de los pacientes con una forma específica de insuficiencia cardiaca.

Se conoce comúnmente como el subtipo de insuficiencia cardiaca de "corazón rígido", y conforma alrededor de la mitad de los 6 millones de casos de insuficiencia cardiaca en Estados Unidos, anotaron los investigadores.

La mayoría de los pacientes con ese subtipo toman un betabloqueante, aunque no es seguro que sean beneficiosos en esos casos.

Como explicaron los investigadores, los fármacos funcionan al reducir la frecuencia cardiaca y la presión arterial, y en general se recomiendan para los pacientes con otra forma de insuficiencia cardiaca, el subtipo de "corazón débil", porque se sabe que ayudan a esos pacientes.

Pero "un problema importante con la insuficiencia de 'corazón rígido' es que no tenemos terapias médicas [farmacológicas] efectivas", explicó el coautor del estudio, el Dr. Timothy Plante, profesor asistente de medicina en el Colegio de Medicina Larner de la Universidad de Vermont.

"Entonces, usamos los mismos medicamentos que funcionan para la insuficiencia cardiaca de 'corazón débil'", señaló en un comunicado de prensa del hospital. "Como los betabloqueantes salvan vidas en la insuficiencia cardiaca de 'corazón débil', damos por sentado que también son efectivos para los pacientes con insuficiencia cardiaca de 'corazón rígido'".

Pero el nuevo estudio sugiere que "esa suposición podría ser incorrecta", advirtió Plante.

Entre los betabloqueantes aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para el tratamiento de la insuficiencia cardiaca se encuentran el bisoprolol, el carvedilol y el metoprolol.

En su investigación, el grupo de Plante monitorizó los datos de casi 1,800 pacientes con insuficiencia cardiaca de corazón rígido que participaron en un ensayo clínico de un nuevo fármaco. De esos pacientes, cuatro de cada cinco tomaban un betabloqueante.

Aunque no se diseñó para probar causalidad, el nuevo análisis encontró que el uso de betabloqueantes es un factor de riesgo de hospitalización por insuficiencia cardiaca en esos pacientes.

Según el autor sénior del estudio, el Dr. Markus Meyer, "el uso de betabloqueantes se asoció con un riesgo un 74 por ciento más alto de hospitalizaciones por insuficiencia cardiaca entre los participantes con insuficiencia cardiaca y una función normal de bombeo [cardiaco]". Meyer es profesor asociado de medicina en la Facultad de Medicina de la Universidad de Minnesota.

El autor principal, el Dr. Daniel Silverman, cardiólogo y profesor clínico de medicina en el Centro Médico y el Colegio de Medicina Larner de la Universidad de Vermont, explicó que "en la insuficiencia cardiaca de 'corazón rígido', el corazón tiene menos capacidad de relajarse y llenarse de sangre. Los betabloqueantes parecen aumentar las presiones en el interior del corazón. Esto podría conducir a síntomas como un empeoramiento de la falta de aire y la retención de fluidos".

¿Significa esto que los pacientes deben cambiar a otro medicamento? Todavía no, apuntó Meyer.

"Es importante comprender que nuestros hallazgos no son prueba de que los betabloqueantes sean dañinos para los pacientes con insuficiencia cardiaca de 'corazón rígido', solo son una señal preocupante", observó Meyer. El equipo de investigación considera que los hallazgos apuntan a la necesidad de un ensayo clínico para evaluar la seguridad y los efectos de los betabloqueantes en los pacientes con insuficiencia cardiaca de "corazón rígido".

Dos especialistas cardiacos que no participaron en el estudio se mostraron cautos respecto a una interpretación exagerada de los hallazgos.

"El tratamiento de este grupo con insuficiencia cardiaca de 'corazón rígido' todavía es muy nuevo, y se necesitan ensayos clínicos para en realidad cambiar nuestro tratamiento de la insuficiencia cardiaca en esta población", comentó el Dr. Satjit Bhusri, cardiólogo del Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York. También anotó que "actualmente, los betabloqueantes tienen un efecto positivo comprobado para la prevención de eventos cardiacos futuros" en los pacientes con insuficiencia cardiaca.

El Dr. James Lafferty es presidente de cardiología en el Hospital de la Universidad de Staten Island, también en la ciudad de Nueva York. Dijo que los hallazgos podrían poner a los pacientes y a los médicos entre la espada y la pared respecto al tratamiento de la insuficiencia cardiaca de "corazón rígido".

Este estudio sugiere que "si un paciente tuviera admisiones recurrentes al hospital por insuficiencia cardiaca y una función cardiaca preservada y tomaba betabloqueantes, debe tener una conversación con su médico" sobre la continuación de los fármacos, planteó Lafferty.

Pero "retirar los betabloqueantes puede provocar hipertensión y arritmias 'de rebote'", añadió, y "también hay otras situaciones (como la fibrilación auricular, la función cardiaca recuperada, un ataque cardiaco reciente y la angina) en que los betabloqueantes resultan beneficiosos".

El estudio se publicó en la edición en línea del 4 de diciembre de la revista JAMA Network Open.

Más información

La Asociación Americana del Corazón (American Heart Association) ofrece más información sobre la insuficiencia cardiaca.


Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

© Derechos de autor 2019, HealthDay

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