Asocian a los antidepresivos durante el embarazo con un aumento ligero en el autismo

Pero la diferencia en el riesgo es muy pequeña, afirman los expertos
pregnant woman exam
pregnant woman exam

JUEVES, 20 de julio de 2017 (HealthDay News) -- En el viejo debate sobre si es seguro tomar antidepresivos durante el embarazo, un estudio nuevo sugiere que la exposición a los medicamentos en el útero podría aumentar el riesgo de autismo de un niño.

El riesgo de autismo fue un 45 por ciento más alto para los niños cuyas madres tomaron antidepresivos, en comparación con los niños nacidos de madres con trastornos psiquiátricos a las que no se les recetaron antidepresivos, encontró el estudio.

"Encontramos unos resultados consistentes que apuntan a un efecto pequeño de los antidepresivos en el autismo, especialmente formas de funcionamiento más altas de autismo sin discapacidad intelectual", dijo el investigador principal, Dheeraj Rai, profesor asociado de psiquiatría en la Universidad de Bristol, en el Reino Unido.

"Creemos que es importante tener en cuenta el riesgo absoluto, que es pequeño", dijo Rai. "Más del 95 por ciento de mujeres en el estudio que tomaron antidepresivos durante el embarazo no tuvieron un hijo con autismo".

Además, el estudio no fue diseñado para demostrar una relación de causalidad, y solamente encontró un asociación entre los antidepresivos y el riesgo de autismo.

Por otra parte, un análisis con mayor profundidad por parte de los investigadores indicó que renunciar a los antidepresivos durante el embarazo no provocaría una reducción drástica de las tasas generales de autismo, indicó Thomas Frazier, jefe de ciencia de Autism Speaks, una organización sin fines de lucro de defensoría del autismo.

"Resulta que se prevendrían el 2 por ciento de los casos de autismo" si ninguna mujer embarazada tomara antidepresivos, dijo Frazier.

"Sin duda no es un factor contribuyente importante", añadió Frazier. "Parece ser una relación significativa y real, pero no es fuerte con respecto a cuántos casos de autismo evitaría".

Otro estudio reciente, publicado en línea el 12 de julio en la revista JAMA Psychiatry, ofreció unas noticias mejores para las futuras madres deprimidas. Esa investigación no encontró una diferencia estadísticamente significativa en la discapacidad intelectual de los hijos de madres que tomaron antidepresivos en comparación con los hijos de madres que no tomaron los medicamentos.

Para el estudio actual, Rai y su equipo de investigación analizaron los datos de más de 254,000 niños y adolescentes de 4 a 17 años de edad que vivían en Estocolmo entre 2001 y 2011.

A casi 5,400 se les diagnosticó autismo. Más de 3,300 de los participantes fueron expuestos a los antidepresivos durante el embarazo. Y más de 12,000 niños y adolescentes nacieron de madres con trastornos psiquiátricos que no tomaban un antidepresivo en el embarazo, reveló el estudio.

A aproximadamente el 4 por ciento de los niños expuestos a los antidepresivos se les había diagnosticado autismo. Por otra parte, el 2.9 por ciento de los niños nacidos de una mujer con un historial de problemas psiquiátricos que no tomaron antidepresivos durante el embarazo desarrollaron autismo.

Los antidepresivos se asociaron con más fuerza con los casos de autismo que no incluían una discapacidad intelectual, indicaron los investigadores.

Nadie sabe con certeza la razón por la que los antidepresivos podrían estar asociados con el autismo, pero la mayoría de antidepresivos actúan incrementando los niveles en el cerebro de un neurotransmisor llamado serotonina, explicaron Rai y Frazier.

"La serotonina es importante para el desarrollo del cerebro y se han observado unos niveles más altos en los niños con autismo", dijo Rai. Añadió que la investigación con animales ha mostrado que exponer a los fetos animales a los antidepresivos que aumentan los niveles de serotonina provoca síntomas de autismo en ellos.

Al mismo tiempo, Rai dijo que es demasiado pronto para descartar la posibilidad de que la depresión en sí aumente el riesgo de autismo, en lugar de los medicamentos recetados para tratarla.

"Se sabe que las formas crónicas de estrés podrían afectar al desarrollo del cerebro del feto", comentó Rai. "También existe la posibilidad de que haya una vía genética común; por ejemplo, las mujeres que tienen un riesgo genético más alto de autismo también podrían ser más propensas a sufrir una depresión grave y a que les receten antidepresivos".

Rai y Frazier también se mostraron de acuerdo en que las mujeres embarazadas con depresión no deberían dejar de tomar los medicamentos sin hablar primero sobre ello con su médico.

"No deberían tomar decisiones sobre el uso de los antidepresivos durante el embarazo según ningún estudio individual, especialmente cuando las evidencias de la investigación están en conflicto entre sí, como en este caso en el que distintos estudios han llegado a diferentes conclusiones", dijo Rai.

"Podría haber riesgos graves si se deja de tomar o no se toman los antidepresivos durante el embarazo, tanto para la madre como para el feto, de modo que no deberían olvidarse los beneficios de estos medicamentos para las madres que los necesitan", comentó.

Rai concluyó que este estudio debería observarse como un "esfuerzo pequeño que contribuye a la compresión de los mecanismos complejos que subyacen al autismo", en lugar de evidencias de que los antidepresivos pueden provocar autismo por sí mismos.

El estudio fue publicado en línea el 19 de julio en la revista BMJ.

Más información

Para más información sobre la depresión durante el embarazo, visite March of Dimes.


Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

© Derechos de autor 2017, HealthDay

logo

Related Stories

No stories found.
logo
Healthday Spanish
spanish.healthday.com