Los ataques cardiacos y ACV se están reduciendo entre las personas con diabetes

diabetes
diabetes

VIERNES, 1 de mayo de 2020 (HealthDay News) -- Un estudio australiano tiene buenas noticias para las personas con diabetes tipo 2: menos personas con diabetes sufren ataques cardiacos y accidentes cerebrovasculares (ACV) en comparación con hace 20 años.

Los ataques cardiacos, los ACV y otras complicaciones cardiovasculares también se han reducido en la población general. Pero las reducciones en las personas con diabetes han superado a las de la población general, señalaron los investigadores.

El autor sénior, el Dr. Timothy Davis, de la Universidad de Australia Occidental, afirmó que los hallazgos son tranquilizadores. Muestran que la gestión moderna del azúcar en la sangre y otros factores de riesgo "está teniendo el efecto deseado en las complicaciones vasculares crónicas", dijo.

Pero no todos los hallazgos fueron positivos.

"Aunque la esperanza de vida está aumentando en ambos grupos, la diferencia [en la esperanza de vida entre los dos grupos] no se ha reducido, lo que sugiere que más personas con diabetes siguen muriendo de forma precoz, pero de otras afecciones no cardiovasculares, como la demencia y el cáncer", indicó Davis.

Si bien el aumento en el uso de los medicamentos para controlar los factores de riesgo cardiacos y de ACV está ayudando a las personas con diabetes tipo 2 a mantenerse más sanas, el ejercicio y la pérdida de peso siguen siendo partes necesarias de la gestión de la diabetes.

"Las personas no deben dormirse en sus laureles. Los factores del estilo de vida son igual de importantes hoy que hace dos décadas", afirmó Davis.

El nuevo estudio observó las dos fases de un estudio sobre la diabetes de Fremantle, en Australia. La primera fase se realizó entre 1993 y 2001. Participaron casi 1,300 personas con diabetes tipo 2 y más de 5,000 sin diabetes.

La segunda fase se realizó entre 2008 y 2016. En ese periodo, más de 1,500 personas con diabetes fueron voluntarias en el estudio, al igual que más de 6,000 personas sin diabetes.

Los investigadores también usaron datos de los expedientes de hospitales y los certificados de defunción de Australia Occidental para identificar los ataques cardiacos, ACV y muertes.

En la fase dos, notaron que las personas con diabetes eran menos propensas a tener un ataque cardiaco o ACV, o a ser hospitalizadas por insuficiencia cardiaca o una amputación de una extremidad inferior, que en la fase uno.

Varios factores podrían explicar esas diferencias, apuntó Davis. Es probable que una mejor gestión de los niveles de azúcar en la sangre tuviera algo que ver, y dijo que las personas con diabetes tipo 2 quizá también se estén diagnosticando antes.

Las personas con diabetes en la segunda fase del estudio eran mucho más propensas a estar tomando medicamentos para unos niveles anómalos de colesterol o para la hipertensión.

Las mejoras en la tasa de enfermedad cardiaca y otras afecciones se observaron sobre todo antes de la introducción de unos medicamentos más recientes para la diabetes (incluyendo unas clases de medicamentos llamados agonistas del GLP-1 e inhibidores SGLT2).

"Solo hubo un número relativamente bajo de personas en la segunda fase del estudio que tomaban esos tratamientos más recientes", dijo Davis. "La esperanza es que la brecha entre las personas con y sin diabetes tipo 2 se reduzca más a medida que se adopten más ampliamente".

Las poblaciones con diabetes tipo 2 difieren entre Australia y Estados Unidos, de forma que los hallazgos del estudio quizá sean distintos entre los dos países.

"Australia está unos 10 años por detrás de EE. UU. respecto a la tasa de obesidad y diabetes tipo 2, así que hay menos diabetes en Australia en este momento", apuntó Davis. "Ha habido avances en los tratamientos de los factores de riesgo de la diabetes y cardiovasculares en los últimos 20 años que están disponibles para el uso de los profesionales clínicos de ambos países, y los datos de EE. UU. sugieren las mismas tendencias en las complicaciones [cardiovasculares], con unas tasas más bajas, en los últimos años".

Una gran diferencia es que Australia tiene un sistema de atención de la salud universal. Eso significa que incluso los pacientes sin seguro no se pierden los mejores tratamientos, enfatizó.

El Dr. Robert Eckel, presidente de medicina y ciencias de la Asociación Americana de la Diabetes (American Diabetes Association), afirmó que es probable que el estudio muestre "lo que está ocurriendo en los países desarrollados de todo el mundo". Aunque la tendencia quizá también esté ocurriendo en Estados Unidos, todavía no ha visto ningún dato que lo confirme.

Como Davis, Eckel sospecha que los cambios positivos tienen varios motivos. Éstos incluyen una mejor identificación y tratamiento del ataque cardiaco y el accidente cerebrovascular, el uso de medicamentos para el colesterol y la presión arterial, una mejor gestión del azúcar en la sangre y, quizá, unos mejores estilos de vida. Los cambios en el estilo de vida son más difíciles de medir, anotó.

¿Qué le aconseja a las personas con diabetes?

"Trabaje de cerca con los profesionales de atención de la salud para gestionar de forma óptima los factores de riesgo de la enfermedad cardiovascular y para ayudar en su propio estilo de vida saludable para el corazón, la diabetes y el cáncer", añadió Eckel.

El estudio aparece en la edición en línea del 30 de abril de la revista Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism.

Más información

Aprenda más sobre la diabetes y la enfermedad cardiaca en la Asociación Americana del Corazón (American Heart Association).


Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

© Derechos de autor 2020, HealthDay

logo

Related Stories

No stories found.
logo
Healthday Spanish
spanish.healthday.com