VIERNES, 7 de abril de 2017 (HealthDay News) -- Los bancos de sangre de EE. UU. se sienten confiados de contar con las herramientas para proteger el suministro de sangre de Estados Unidos de nuevos posibles brotes del virus del Zika durante la próxima temporada de mosquitos.
Una transfusión de sangre contaminada con el Zika puede contagiar el virus a un receptor no consciente de ello, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.
Pero unos sofisticados análisis genéticos y procedimientos de procesamiento de sangre hacen que sea muy poco probable que alguien contraiga el Zika a partir de sangre donada, según una serie de artículos que aparecen en una edición especial de la revista Transfusion.
Todas las donaciones de sangre en Estados Unidos pasan por pruebas que buscan el virus del Zika, basándose en las directrices de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU., señaló Susan Stramer, vicepresidenta de asuntos científicos de la Cruz Roja Americana.
Alrededor de 40 donaciones de EE. UU. han tenido un resultado positivo del Zika desde que comenzaron las pruebas, la mayoría en Florida, dijo Stramer.
Gracias a las pruebas, no ha habido casos documentados ni alegados de infección con el Zika a través de una transfusión de sangre en Estados Unidos ni en sus territorios, apuntó el Dr. Louis Katz, director médico de los Centros de Sangre de Estados Unidos (America's Blood Centers).
El riesgo "era bajo antes de las pruebas a los donantes y ahora es una posibilidad extremamente remota, dado que se han implementado las pruebas a los donantes", dijo Katz. "Además, las mujeres en el periodo más vulnerable del embarazo para unos malos resultados fetales raras veces reciben donaciones de sangre en Estados Unidos, de forma que [los defectos congénitos relacionados con el Zika] son unos riesgos incluso más remotos".
El Zika no provoca síntomas en 4 de cada 5 personas infectadas, así que es poco probable que la mayoría de donantes sospechara que portan el virus.
La principal amenaza del Zika es para los fetos, al aumentar el riesgo de una mujer embarazada de dar a luz a un bebé con microcefalia u otros defectos congénitos. Una de cada 10 mujeres embarazadas de EE. UU. con una infección confirmada en 2016 tuvieron un feto o un bebé afectado por defectos congénitos relacionados con el Zika, según los CDC.
La microcefalia hace que los recién nacidos tengan cabezas y cerebros poco desarrollados.
Cuatro personas en Brasil han contraído el Zika a través de la sangre infectada de tres donantes, dijo Stramer. En ese momento, las donaciones de sangre no se estaban evaluando de forma efectiva en ese país.
Los bancos de sangre de EE. UU. utilizan dos pruebas que buscan el material genético del Zika en muestras, explicó Katz. Cualquier donación con una posible infección se descarta.
El año pasado, la evaluación de las muestras de sangre detectó 23 donaciones potencialmente contaminadas con el Zika de casi 360,000 realizadas en la parte sureña de Estados Unidos. Se juzgó que 14 de esas muestras, todas de Florida, probablemente estaban infectadas según análisis genéticos posteriores y entrevistas con los donantes, de acuerdo con uno de los nuevos estudios.
Diez de los 14 donantes reportaron haber viajado a un área con transmisión activa del Zika en un plazo de 90 días antes de donar sangre, informaron los investigadores. Dos viajaron dentro del área del brote de Miami, y los demás viajaron a Puerto Rico, Jamaica, Trinidad, México, Cuba o la República Dominicana.
Un segundo estudio reportó la detección de cinco muestras contaminadas con el Zika entre más de 466,000 donaciones en todo Estados Unidos, todas vinculadas con el viaje a América Central o del Sur. Los casos ocurrieron en Arizona, California, Nevada, Nueva York y Texas.
"Sabemos que estas pruebas son extremadamente sensibles. Son mucho más sensibles que las pruebas usadas para el diagnóstico en los laboratorios de salud pública", dijo Stramer. "Es altamente improbable que pasemos por alto una unidad infecciosa, pero nunca se puede decir nunca".
Esas pruebas también detectaron más de 350 donaciones de sangre infectadas en Puerto Rico, donde la transmisión del Zika alcanzó niveles epidémicos el año pasado, dijeron los investigadores.
Las pruebas de detección son tan efectivas que los centros de donación no se molestan en preguntar sobre los viajes a áreas con Zika activo. "Obtenemos una respuesta más honesta a partir de las pruebas que preguntando al donante sobre el historial de viajes", comentó Stramer.
El procesamiento rutinario de la sangre añade otra capa de protección al suministro de sangre. Un tercer estudio en la revista informa que el Zika queda desactivado cuando el plasma se separa de la sangre completa y se somete a la pasteurización estándar.
"De hecho, el virus del Zika parece ser más sensible al calor que todos los demás virus relacionados estrechamente", escribieron los reguladores federales en un editorial publicado junto con los estudios.
Pero como la pasteurización altera a las proteínas en la sangre completa, no puede ser utilizada para deshacerse del Zika en la mayor parte de la sangre donada, anotó Stramer.
En cualquier caso, las personas tienen muchas más probabilidades de contraer Zika de los mosquitos, o incluso por transmisión durante las relaciones sexuales, que a partir de una donación de sangre, concurrieron Stramer y Katz.
"Es biológicamente posible. La transmisión a través de las transfusiones se ha demostrado. Pero el riesgo en EE. UU. es remoto", dijo Stramer.
Aunque se limitó mayormente a América Latina y el Caribe en 2016, el Zika apareció en Estados Unidos el verano pasado, y se produjeron transmisiones a nivel local en personas de vecindarios del área de Miami.
Pero, hasta ahora, la mayoría de casos de Zika en EE. UU. han ocurrido en viajeros que contrajeron el virus en otros países. De los 5,197 casos reportados, solo 222 ocurrieron por transmisión local, la mayoría en Florida, según los CDC.
Más información
Para más información sobre la infección con el Zika a partir de las transfusiones, visite los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU.
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