VIERNES 1 de junio (HealthDay News/HispaniCare) -- Una nueva investigación sugiere que las mujeres de mediana edad que se mantienen activas en su vida diaria tienen menores niveles de grasa intraabdominal, un factor de riesgo para la enfermedad cardiaca.
"Hacer una ligera modificación de su actividad semanal, tales como reducir el tiempo que pasa frente al televisor o incrementar el tiempo que camina al trabajo o a la escuela, puede marcar la diferencia en su salud a largo plazo", dijo la autora del estudio, la Dra. Sheila Dugan, psiquiatra del Centro Médico de la Universidad de Rush en Chicago. Los resultados fueron los mismos en mujeres blancas y negras.
"El enfoque en la grasa visceral se ha convertido en un tema relevante debido al síndrome metabólico [que predispone a las personas para la enfermedad cardiaca], y parte de lo que nos lleva a diagnosticar el síndrome metabólico es el contenido de grasa visceral", dijo la Dra. Suzanne Steinbaum, directora de la unidad de mujeres y enfermedad cardiaca del Hospital Lenox Hill de la ciudad de Nueva York. "Aquí nos hemos centrado en uno de los factores de riesgo principales que causa el síndrome metabólico, que constituye una de las razones más importantes para desarrollar la enfermedad de la arteria coronaria. El ejercicio no sólo ayuda a poner en forma su corazón, sino que también reduce el riesgo de grasa visceral, lo que es todo un logro".
Dugan tenía previsto presentar sus hallazgos en Nueva Orleáns el viernes en la reunión anual del American College of Sports Medicine.
La grasa intraabdominal, o la grasa que rodea los órganos del abdomen y el tórax, tiende a acumularse en la mediana edad y puede contribuir al desarrollo de la diabetes, la hipertensión y la enfermedad cardiaca.
"Se sabe que la grasa que rodea los órganos está más relacionada de manera independiente con la enfermedad cardiaca, la diabetes y otras afecciones que pueden causar problemas crónicos a largo plazo", confirmó Dugan.
Y una mujer no necesita verse aparentemente robusta para tener un "michelín" adicional potencialmente problemático alrededor de sus órganos.
Estudios previos han encontrado que el ejercicio puede reducir la cantidad de grasa intraabdominal de una mujer.
Rush y sus colegas analizaron los niveles de actividad física y las medidas de grasa intraabdominal de 338 mujeres de Chicago. Las participantes rellenaron una encuesta en la que indicaban la cantidad de actividad física, incluidas las tareas domésticas, que realizaban cada semana y mes, y cada una recibió una puntuación que reflejaba dicha actividad. Esta puntuación se correlacionó con sus niveles de grasa intraabdominal.
La grasa intraabdominal se medió a través de un escáner por TC que, según Dugan, es el "método de medida estándar por excelencia".
"Las que tenían una mayor puntuación de actividad física presentaban menor grasa intraabdominal", apuntó Dugan. "Con simplemente realizar más actividad física se consigue un impacto positivo sobre el organismo, lo que a su vez impactará positivamente en la salud".
Más información
La American Heart Association tiene más información sobre las maneras de incrementar los niveles de actividad física.
