Muchas mudanzas en la niñez podrían afectar la salud a largo plazo

MARTES, 7 de febrero (HealthDay News) -- Los niños que se mudan frecuentemente podrían estar en mayor riesgo de una peor salud y problemas psicológicos más adelante en la vida, según un estudio reciente.

Los investigadores también hallaron que los niños que cambiaban de vivienda frecuentemente eran más propensos a beber y fumar mucho en la adolescencia y la adultez.

En el estudio, los investigadores dieron seguimiento a 850 personas de Escocia de 15, 35 y más de 55 años de edad durante veinte años.

Una de cada cinco personas habían vivido en la misma dirección durante toda la niñez, 59 personas se habían mudado una o dos veces, y alrededor de 21 por ciento se habían mudado por lo menos tres veces.

Los niños en hogares de padres solteros o los que tenían padrastros eran más propensos a mudarse que los demás. Las familias con dos o tres hijos también eran mucho más propensas a mudarse que las familias con cuatro o más hijos.

Las mudanzas frecuentes en la niñez se asociaron con un mayor riesgo de mala salud general, problemas psicológicos, y el consumo empedernido de alcohol y tabaco en la adolescencia y la adultez.

El estudio fue publicado en la edición en línea del 6 de febrero de la revista Journal of Epidemiology and Community Health.

Aunque el estudio descubrió una asociación entre las mudanzas frecuentes y una peor salud posterior, no probó que las mudanzas frecuentes fueran la causa de la peor salud.

Los autores del estudio señalaron en un comunicado de prensa de la revista que tener que cambiar de escuela podría afectar la vida familiar o social de los niños, lo que podría explicar algunos de los efectos negativos.

Más información

La Red Nacional para el Cuidado Infantil de EE. UU. ofrece más información sobre cómo preparar a los niños para una mudanza.

© Derechos de autor 2011, HealthDay