LUNES 2 de agosto (HealthDayNews/HispaniCare) -- La obesidad y la presión sanguínea alta en los niños (dos peligros importantes, y muchas veces relacionados, que era poco usual en este grupo de edad no hace tanto) necesitan más atención y tratamiento por parte de los pediatras.
Esta es la conclusión de dos artículos en la edición de agosto de Pediatrics, que recomiendan que los niños sean evaluados por hipertensión antes de que muchos de ellos dejen de usar pañales y que los doctores se esfuercen más para identificar a los niños obesos y desanimar la conducta que promueve el aumento de peso.
Aunque la obesidad infantil está alcanzando proporciones epidémicas, los pediatras reconocen y tratan poco el problema, según las conclusiones de un estudio.
Según los U.S. Centers for Disease Control and Prevention, el 15 por ciento de los niños y adolescentes estadounidenses tienen sobrepeso. Los jóvenes con sobrepeso tienen más probabilidades de crecer y llegar a ser adultos con sobrepeso u obesos. Por otro lado, tener sobrepeso aumenta su riesgo de enfermedad del corazón, presión sanguínea alta y diabetes.
"Los niños no sólo tienen sobrepeso y obesidad, sino que también están teniendo las comorbilidades que tienen los adultos", dijo Barrie Wolfe, un dietista registrado del programa de pérdida de peso de la Universidad de Nueva York.
En el estudio, investigadores del Children's Hospital de Pittsburgh evaluaron los récordes de 2,515 visitas rutinarias de niños que ocurrieron entre diciembre 2001 y febrero 2002.
"Me frustraba tratar de ayudar a los niños con la obesidad y quería ver lo que los demás estaban haciendo", afirmó la autora del estudio, la Dra. Sarah Harvey O'Brien, quien era residente de pediatría en el momento del estudio.
En su mayoría, los niños estudiados provenían de áreas urbanas y el 70 por ciento eran negros.
Los investigadores encontraron que 244 niños cumplían con la definición de obesidad, sin embargo la obesidad era mencionada en sólo el 53 por ciento de sus registros. En los que fueron identificados como obesos, el 81 por ciento de los registros mencionaba información adecuada sobre la dieta de los niños, mientras que sólo el 27 por ciento contenía notas detalladas sobre el nivel de actividad o los hábitos de televisión de los niños.
"En la mitad de los casos, un niño obeso fue a una visita rutinaria y no era identificado", dijo O'Brien. Añadió que es importante que los médicos midan el índice de masa corporal (IMC) de los niños, porque a veces no se puede identificar con sólo ver a un niño que está en sobrepeso. Dijo que los padres deben preguntar a los pediatras cuál es el IMC de su niño.
"Hablar de la obesidad puede ser difícil, pero si un padre pregunta por el IMC, puede ayudar a que empiecen a hablar sobre el peso", explicó.
Además de la baja tasa de identificación, dijo O'Brien, "el otro factor que realmente me sorprendió es que los médicos no hablaban sobre los hábitos de televisión. Si los niños se sientan frente a la televisión, no se mueven y es más probable que consuman alimentos altos en grasas". Los pediatras, apuntó, deben recordar a los padres limitar el tiempo de televisión. En este estudio, sólo el 5 por ciento lo hacía.
Wolfe dijo que los doctores pueden ofrecer un punto de vista objetivo y ayudar a los padres y niños a tratar los problemas de peso iniciales, lo que podría prevenir, según afirmó, "los problemas sociales y el aislamiento que puede conllevar ser un adolescente con sobrepeso".
Wolfe dijo que la actividad física es muy importante para ayudar a los niños a mantener un peso saludable porque es muy difícil restringir lo que los jóvenes comen. Su recomendación es que los padres hagan del ejercicio algo divertido. Caminen en familia o salgan a montar bicicleta o a nadar juntos, dijo.
Una de las razones por la que controlar el peso de su niño es importante es que el peso excesivo hace que la aparición de serias condiciones médicas, tales como la presión sanguínea alta, sea más probable.
Debido al creciente problema de la obesidad infantil, la hipertensión infantil también está aumentando. Según un nuevo informe sobre la presión sanguínea alta en los niños, que también aparece en Pediatrics, muchos niños con presión sanguínea alta también tienen sobrepeso.
El reporte incluye nuevas directrices para los pediatras y recomienda una evaluación de presión sanguínea cuando el niño tenga 3 años de edad. Los niveles ideales de presión sanguínea cambian con la edad, el sexo, el peso y la estatura del niño. Por ejemplo, la presión sanguínea promedio para un varón de 5 años que está en el percentil 50 de estatura sería 95/53 milímetros de mercurio (mm/Hg), mientras que para una niña de la misma edad, también en el percentil 50 de estatura, la presión sanguínea promedio sería 93/54 mm/Hg.
Si un niño es identificado con presión sanguínea alta, las directrices recomiendan cambios en el estilo de vida, parecidos a los que se sugieren para los adultos. Éstos incluyen perder peso y aumentar la actividad física. Este informe también recomienda que cualquier cambio esté basado en la familia, en lugar de dirigirse sólo al niño.
El reporte afirma que la función los medicamentos para el control de la hipertensión en el tratamiento de los niños no es tan clara como en los adultos. Esto se debe a que pocos medicamentos usados para tratar la presión alta se han probado adecuadamente en niños. Sin embargo, el informe afirma que si otros factores de riesgo cardiovascular, tales como el colesterol alto, se encuentran presentes, y si los cambios de estilo de vida no bajan la presión sanguínea, entonces los medicamentos pueden ser útiles.
Más Información
Para obtener más información sobre la obesidad en los jóvenes y lo que se puede hacer al respecto, visite la American Academy of Child and Adolescent Psychiatry.
