JUEVES, 15 de mayo de 2014 (HealthDay News) -- Antes de comenzar a disfrutar del verano, tenga en cuenta un nuevo estudio que halló que en las salas de emergencias de los hospitales de EE. UU. en 2012 se trataron casi 5,000 lesiones relacionadas con las sustancias químicas de las piscinas.
Los niños y adolescentes sufrieron casi la mitad de esas lesiones, y más de un tercio ocurrieron en casa, hallaron unos investigadores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. No resulta sorprendente que la mayoría ocurrieran entre el día de los caídos y el día del trabajo, y casi la mitad de estos incidentes ocurrieron en un fin de semana.
"Las sustancias químicas se añaden al agua de las piscinas para evitar la propagación de los gérmenes. Pero hay que manejarlas y guardarlas con seguridad para evitar lesiones graves", enfatizó en un comunicado de prensa de los CDC Michele Hlavsa, jefa del Programa de Natación Segura de la agencia.
Las tres lesiones más comunes por las sustancias químicas de las piscinas son problemas respiratorios (por respirar los vapores), lesiones oculares y lesiones de la piel, según los CDC.
Para conmemorar la semana de prevención de las enfermedades y las lesiones en las aguas recreativas, del 19 al 25 de mayo, los CDC ofrecen varios consejos de seguridad para las sustancias químicas de las piscinas para los propietarios y administradores de piscinas:
Aunque las sustancias químicas para la piscina mantienen el agua segura, también es importante que las personas eviten que los gérmenes entren al agua en primer lugar. Entre formas de lograrlo se hallan no ir a la piscina si se tiene diarrea, y asegurarse de llevar a los niños al baño, anotaron los expertos.
Además, puede ayudar a protegerse de las enfermedades al no tragar agua de la piscina, aconsejaron los CDC.
Más información
La Comisión de Seguridad de los Productos del Consumidor de EE. UU. ofrece consejos para la seguridad de spas y piscinas.
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