VIERNES, 20 de diciembre de 2013 (HealthDay News) -- La temporada de fiestas es uno de los momentos más peligrosos del año en las carreteras de EE. UU. Entre el día de acción de gracias y Nochevieja, hasta 900 personas de todo el país podrían morir en accidentes de coche provocados por conductores borrachos, informan las autoridades de seguridad.
"Hemos avanzado muchísimo en cambiar las normas sociales asociadas con beber y conducir, pero falta mucho para resolver el problema", comentó en un comunicado de prensa de la Asociación de Seguridad Vial de los Gobernadores (Governors Highway Safety Association, GHSA) Jonathan Adkins, subdirector ejecutivo de la asociación.
"La conducción bajo la influencia del alcohol se cobró 10,322 vidas el año pasado, un aumento del 4.6 por ciento frente a 2011", lamentó. "Se trata de una estadística alarmante que estamos comprometidos a abordar".
La GHSA y sus miembros, que incluyen a las oficinas de seguridad vial de los 50 estados, se unen a la policía estatal y federal para lanzar el programa anual Drive Sober or Get Pulled Over (algo así como "conduzca sobrio o sufra un arresto"). La iniciativa combina una presencia policial de alta visibilidad con anuncios y esfuerzos comunitarios para detectar y disuadir de la conducción bajo la influencia del alcohol.
El programa comenzó el 13 de diciembre y continuará hasta el 1 de enero.
En un esfuerzo por reducir la conducción bajo la influencia del alcohol, 18 estados tienen leyes de bloqueo de encendido para los conductores culpables de conducir borrachos por primera vez. La GHSA exhorta a los demás estados a implementar esas leyes.
La organización también se está asociando con la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico Vial de EE. UU. y los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades de EE. UU. en un estudio a largo plazo para evaluar las mejores prácticas referentes a las leyes estatales de bloqueo del encendido. Se espera que los resultados se publiquen a principios de 2014.
La GHSA también respalda esfuerzos por desarrollar y evaluar una nueva tecnología llamada Sistema de Seguridad para la Detección del Alcohol en el Conductor. El sistema cuenta con sensores dentro del coche que miden los niveles de alcohol en la sangre mediante el aliento o el tacto para determinar si el conductor está por debajo del límite legal para la incapacidad. Aunque parece promisoria, la tecnología aún está en la fase inicial del desarrollo, según el comunicado de prensa.
Muchos estados han aumentado los programas de refuerzo en carretera y las campañas de educación pública.
La Oficina de Seguridad del Tráfico de California ofrece una aplicación de smartphone que provee mapas que muestran las ubicaciones de los bares que ofrecen bebidas no alcohólicas gratis y otros incentivos para los conductores designados sobrios. La Oficina de Seguridad Vial de Maryland ofrece talleres para demostrar cómo el alcohol afecta la capacidad de conducción de una persona.
Más información
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. tienen más información sobre conducir bajo la influencia del alcohol o las drogas.
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