JUEVES, 27 de diciembre de 2018 (HealthDay News) -- Los antibióticos salvan vidas. Pero se recetan y usan en exceso, lo que conduce a gérmenes resistentes a los antibióticos que son más fuertes que los fármacos disponibles para tratarlos.
Esto también crea más efectos secundarios de los medicamentos, reacciones alérgicas e infecciones graves.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU., en apenas un año, se recetaron más de 262 millones de regímenes de antibióticos de forma ambulatoria, lo que equivale a 842 recetas por cada 1,000 adultos. Entre los niños de hasta 9 años de edad y los adultos de a partir de 65 años, la tasa fue mayor que uno a uno, es decir, que muchos tomaron más de una receta en el transcurso de un año.
Los centros de atención de urgencias, en particular, tienen una tasa muy alta de recetas de antibióticos a pacientes ambulatorios, con frecuencia porque los pacientes los exigen, incluso cuando no son necesarios.
Como consecuencia, las personas experimentan una cantidad creciente de infecciones provocadas por bacterias que son resistentes a varios antibióticos. Éstas incluyen al SARM, la E. coli y cepas de neumonía.
Información relevante sobre el uso excesivo de los antibióticos:
A veces un antibiótico sí resulta necesario, pero otras veces, no.
Para evitar la resistencia a los antibióticos, siga estas mejores prácticas:
Tome medidas para limitar la exposición a los antibióticos de forma que le funcionen cuando realmente los necesite.
Más información
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. ofrecen información detallada sobre la resistencia a los antibióticos para ayudarlo a mantenerse seguro.
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