Una investigaciones hallan que colorantes y rayos especiales pueden aniquilar el SARM

Pero los expertos señalan que estas nuevas tecnologías no substituyen los procedimientos básicos para el control de las infecciones

MIÉRCOLES, 10 de septiembre (HealthDay News/Dr. Tango) -- Un nuevo tipo de pintura que libera dióxido de titanio cuando se expone a la luz fluorescente y un colorante verde para heridas que emite moléculas tóxicas cuando se activa por luz infrarroja pueden acabar con la letal súper bacteria conocida como SARM, según plantean dos estudios recientes.

SARM es el acrónico de Staphylococcus aureus resistente a la meticilina. Se trata de una cepa de estafilococos que es resistente a muchos de los antibióticos que se utilizan comúnmente para tratarla y puede llegar a ser mortal. Ambos informes fueron presentados en la reunión de otoño de la Society for General Microbiology celebrada el martes en el Trinity College de Dublín.

En el primer estudio, la investigadora británica Lucia Caballero, de la Universidad Manchester Metropolitan, halló que la pintura que contenía partículas de dióxido de titanio eliminaba la bacteria cuando absorbía la luz ultravioleta.

"De resultar cierto, esta tecnología tendrá un impacto positivo en el área de la salud", aseguró Caballero.

La misma reacción ocurre cuando las pinturas que contienen dióxido de titanio se exponen a luz infrarroja. Los investigadores hallaron que la pintura que contenía dióxido de titanio eliminaba con éxito las bacterias cuando la concentración de estas nanopartículas era más fuerte que en la pintura normal. De hecho, hallaron que la E. coli se aniquilaba con luces fluorescentes.

"Existen muchas circunstancias en las que es necesario o deseable sustraer o eliminar microorganismos alojados en huéspedes biológicos o en superficies", apuntó Caballero. "El mantenimiento de estándares higiénicos es esencial en los hospitales, las compañías farmacéuticas y la industria alimentaria. Se puede mejorar la higiene de las superficies mediante la acción de luces fluorescentes sobre superficies catalíticas, como pinturas que contienen nano-titanio, para retardar la contaminación y ahorrar costos de mantenimiento en limpieza".

En el segundo informe, el Dr. Ghada Omar, del University College London, halló que se podía acabar con el 99 por ciento de las bacterias SARM en heridas infectadas mediante la acción de un colorante verde que produce moléculas tóxicas cuando es activado por luz infrarroja.

"Los químicos producidos cuando se activa el colorante afectan a las bacterias de muchas formas por lo que es improbable que éstas puedan desarrollar resistencia al tratamiento", enfatizó Omar en la declaración. "Esto la convierte en la opción ideal y probablemente en la única forma de tratar las infecciones con múltiples bacterias resistentes a medicamentos, incluida el SARM".

Las heridas infectadas son un gran problema para miles de pacientes hospitalizados. Hasta el nueve por ciento de las infecciones adquiridas en el hospital tienen lugar durante la cirugía y contribuyen al 77 por ciento de las muertes después de las operaciones. Estas infecciones aumentan la duración de la estancia hospitalaria en el hospital, además de los los costos, anotó Omar.

El Dr. Pascal James Imperato, decano y profesor de servicio distinguido del Programa de postgrado en salud pública del Centro médico SUNY Downstate de Brooklyn, dijo que se necesita realizar más trabajos de investigación antes de que estas tecnologías se vuelvan prácticas.

"Este trabajo se encuentra ahora en una etapa experimental", destacó Imperato. "Es un logro interesante, pero hay que ver más estudios para determinar si realmente funcionará o no".

El Dr. Marc Siegel, profesor asociado de medicina en la Facultad de medicina de la Universidad de Nueva York, cree que la higiene básica puede hacer más por erradicar la amenaza de infecciones hospitalarias que estas nuevas tecnologías.

"Esta tecnología es muy prometedora, pero nos aleja de la cuestión real, de que tenemos un problema de higiene y esterilidad en los hospitales", advirtió Siegel. "El problema real es que los médicos no se cambian las batas ni los guantes con la suficiente frecuencia. Tampoco estamos usando desinfectantes para las manos".

Siegel remarcó que el agua y el jabón, cuando se usan adecuadamente, se deshacen de la mayoría de estas bacterias.

"El SARM se ha mantenido vivo durante más de 20 años y es un síntoma de nuestra incapacidad para limpiar y esterilizar adecuadamente nuestras instalaciones mientras que, al mismo tiempo, usamos de manera excesiva los antibióticos", apuntó Siegel.

Más información

Para saber más información sobre el SARM, visite los U.S. Centers for Disease Control and Prevention.


Artículo por HealthDay, traducido por Dr. Tango

Related Stories

No stories found.
logo
Healthday Spanish
spanish.healthday.com