VIERNES, 1 de mayo de 2020 (HealthDay News) -- Un bebé de Texas de 3 años en condición crítica con la COVID-19 se trató y recuperó con éxito, informan unos médicos.
Es uno de los primeros casos de su tipo, según el equipo de médicos del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas, en Houston (UTHealth).
Anotaron que la creencia inicial de que los niños no están en riesgo de una enfermedad grave con la COVID-19 ha quedado desmentida a medida que se acumula más información sobre la enfermedad provocada por el nuevo coronavirus.
"Todavía es muy pronto respecto a la investigación y los datos disponibles sobre la COVID-19, y como proveedores, debemos ser conscientes de que los niños pueden enfermar de gravedad con este virus", enfatizó el primer autor del estudio, el Dr. Álvaro Coronado Muñoz, profesor asistente de atención crítica pediátrica de UTHealth.
"Es importante que los padres comprendan que no deben retrasarse en la búsqueda de atención para sus hijos si hay cualquier presencia de fiebre o dificultad para respirar", señaló Coronado en un comunicado de prensa de la universidad.
En el informe de caso del equipo, el niño llegó al hospital con congestión nasal, una respiración y una frecuencia cardiaca aceleradas, una reducción en el consumo de alimentos, una temperatura de 97 grados Fahrenheit (36.1 grados centígrados) y una saturación de oxígeno baja. El niño fue transferido a una unidad de cuidados intensivos pediátricos (UCIP), y llegó con una presión arterial baja, hipotermia, y seguía con una frecuencia cardiaca y una respiración aceleradas.
Las radiografías de los pulmones revelaron señales de neumonía. En lugar de esperar los resultados de las pruebas de frotis nasales, que podrían tardar semanas, los médicos tomaron medidas de inmediato.
Coronado comentó que tras ver las radiografías pulmonares "sospechamos de inmediato que podría ser el coronavirus. Tomamos medidas de protección tempranas para proteger a nuestro equipo y evitar la propagación a los proveedores de atención de la salud".
Como el bebé tenía una insuficiencia respiratoria grave y se sospechaba la COVID-19, el paciente fue colocado en un ventilador mecánico durante cinco días, y recibió cinco días de tratamiento con dos medicamentos, hidroxicloroquina y azitromicina.
Tras cinco días, el bebé fue dado de alta de la UCIP. El noveno día, el niño se había recuperado y lo enviaron a casa con oxígeno suplementario, según el estudio de caso, publicado en una edición reciente de la revista New England Journal of Medicine.
"Aunque este caso se limita a un solo paciente, ilustra que pueden ocurrir casos graves de COVID-19 en niños, pero también que se pueden gestionar de forma exitosa", añadió Coronado.
Más información
La Academia Americana de Pediatría (American Academy of Pediatrics) ofrece más información sobre el nuevo coronavirus.
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