VIERNES, 1 de mayo de 2020 (HealthDay News) -- No están en la escuela. Sus amigos les hacen falta. Y papá y mamá parecen preocupados. Los cierres durante la pandemia del coronavirus pueden afectar a cualquiera, sobre todo a los niños.
La mayoría de los niños son conscientes de lo que está sucediendo a algún nivel, aseguró el Dr. David Schonfeld, director del Centro Nacional de Crisis Escolar y Duelo del Hospital Pediátrico de Los Ángeles.
Incluso los niños pequeños detectan la ansiedad de sus padres y los cambios en el horario familiar.
Para ayudar a sus hijos a gestionar sus sentimientos, puede preguntarles qué comprenden y qué les preocupa.
"Si a un padre le preocupa lo que está sucediendo, los niños pueden detectarlo. Aconsejo a las personas que no lo oculten", planteó Schonfeld en un comunicado de prensa del hospital. "Los niños quieren que los adultos sean auténticos, genuinos y honestos".
Los adultos que puedan hablar con los niños sobre cómo afrontar estos eventos les enseñarán habilidades que los ayudarán a afrontar adversidades futuras, aseguró.
Pero los padres deben callarse algunas de sus preocupaciones, por ejemplo las preocupaciones respecto al dinero, enfatizó Schonfeld.
"Un comentario casual a un niño de 12 años, como 'el mercado de valores acaba de destruir tu fondo universitario' solo logrará que el niño se preocupe. Si esto es lo que preocupa a un padre, tendrá algo de tiempo para resolverlo", dijo Schonfeld.
Los adultos deben mantener una actitud positiva. "Es un momento para transmitir a los niños que los científicos y otras personas que están a cargo están tomando medidas positivas", señaló.
Ahora es una oportunidad para que los padres pasen tiempo con sus hijos haciendo proyectos creativos o viendo películas o televisión.
"Recomiendo ver cosas que sean inspiradoras o divertidas y que puedan ser una distracción saludable", aconsejó Schonfeld.
Schonfeld sugiere varias técnicas de afrontamiento para ayudar a los niños a gestionar la ansiedad y el estrés:
Si su hijo tiene problemas emocionales, deje que exprese sus sentimientos y no lo juzgue, dijo Schonfeld.
Además, como este es un periodo de incertidumbre, establezca un horario en casa que se pueda considerar predecible. "Quizá no pueda decirle a los niños cuándo podrán ir al parque o a casa de un amigo, pero puede decirles a qué hora será la cena", afirmó Schonfeld. Esto es tranquilizador.
La meta de estar juntos no es divertirse mucho ni ser el más productivo en la escuela o el trabajo, afirmó.
"La meta es averiguar cómo equilibrar todas las cosas que se les está pidiendo a las personas que hagan. Siempre y cuando los adultos ayuden a los niños a mantenerse seguros y cómodos y confiados, esto los pondrá en la mejor posición para hacer progresos en el futuro", añadió Schonfeld.
Más información
Aprenda más sobre cómo gestionar el estrés durante la pandemia en los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU.
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