VIERNES 27 de octubre (HealthDay News/HispaniCare) -- El macho estadounidense lleno de testosterona podría estar perdiendo garra.
Durante las últimas dos décadas, los niveles de esta hormona sexual han estado decayendo de forma constante entre los hombres de EE.UU., según un estudio.
Por ejemplo, los niveles totales promedio de testosterona en los hombres entre los 65 y 69 disminuyeron de 503 nanogramos/decilitro (ng/dL) en 1988 a 423 ng/dL en 2003.
Las razones para esta tendencia no están claros, afirmaron investigadores de los Institutos de investigación de Nueva Inglaterra en Waterdown, Massachusetts. Apuntaron que ni el envejecimiento ni ciertos otros factores de salud, como fumar o la obesidad, pueden explicar el descenso por completo.
"Los niveles masculinos de testosterona en el suero parecen variar por generación, incluso después de tomar la edad en cuenta", afirmó en una declaración preparada el autor principal del estudio, Thomas G. Travison.
La testosterona es la principal hormona sexual masculina y desempeña un importante papel en mantener la masa ósea y muscular. Los niveles bajos de testosterona se han asociado con problemas de salud, como la disminución de la libido y la diabetes.
Es normal que los niveles de testosterona de los hombres lleguen al máximo a finales de sus 20 y luego comiencen a descender gradualmente, según los expertos. Pero este estudio encontró que los niveles generales de testosterona son más bajos que hace 20 años.
"En 1988, los hombres a partir de los 50 años tenían mayores concentraciones de testosterona en suero que los hombres comparables de 50 años en 1996. Esto sugiere que algún factor independiente de la edad podría estar contribuyendo a los descensos observados en la testosterona con el tiempo", apuntó Travison.
Travison y sus colegas analizaron muestras de sangre, junto con información sobre la salud y otras, de unos 1,500 hombres del área metropolitana de Boston que participaron en el Estudio del envejecimiento masculino de Massachusetts. El estudio recolectó datos de 1987 a 1989, de 1995 a 1997 y de 2002 a 2004.
"Este análisis trata con hombres que nacieron entre 1915 y 1945, pero nuestros datos de línea base no se obtuvieron hasta finales de los 80, cuando los sujetos más viejos tenían unos 70 años y los más jóvenes unos 45", explicó Travison.
"Los eventos que ocurrían en décadas anteriores podrían ciertamente explicar nuestros resultados, si sus efectos persistieron en años recientes", anotó.
Los hallazgos fueron publicados en el Journal of Clinical Endocrinology and Metabolism.
Más información
La U.S. National Library of Medicine tiene más información sobre la testosterona.
