El diagnóstico de las enfermedades crónicas podría depender del lugar de residencia

Investigadores señalan que las tasas de mortalidad de las regiones que tienen la mayor cantidad de diagnósticos son más bajas, aunque no está claro por qué

MARTES, 15 de marzo (HealthDay News/HolaDoctor) -- Un estudio reciente halla que la probabilidad de que los pacientes de Medicare sean diagnosticados con una enfermedad crónica podría depender del lugar donde viven, una disparidad que podría dificultar la evaluación de la calidad de la atención que reciben los pacientes.

Ciertos grupos de pacientes de Medicare en las regiones con la mayoría de los diagnósticos también tenían una menor tasa de mortalidad por caso para afecciones crónicas como la enfermedad arterial coronaria y la insuficiencia renal, pero las razones no están claras, informaron los investigadores.

Lo lógico sería que una persona sea diagnosticada con una enfermedad crónica por lo enferma que está, señalaron los investigadores.

Sin embargo, los resultados sugieren que el diagnóstico de enfermedades crónicas se ve influenciado por la "intensidad de la atención de la salud" de una región en particular, que tiene que ver con la cantidad de médicos y especialistas que operan en una región determinada, el acceso a los médicos y la probabilidad de que los médicos remitan a un especialista o soliciten pruebas de laboratorio y de imagen.

"El estudio sugiere que el diagnóstico de enfermedades no es sólo una particularidad del paciente, sino que se relaciona con la intensidad con que se proporciona atención médica en una región", apuntó el autor principal del estudio, el Dr. John Wennberg, profesor emérito y fundador del Instituto Dartmouth. "Por ejemplo, si en una región determinada la gente ve que hay una gran cantidad de médicos, acude mucho al médico y se someten a muchas pruebas de laboratorio, tal vez se deba a que existe una relación perfecta entre enfermedad y la cantidad de atención que se proporciona. Pero también puede ser que entre más médicos vea, más diagnósticos reciba".

El estudio, realizado por el Dr. H. Gilbert Welch del Centro Médico del Departamento de Asuntos de Veteranos de White River Junction, en Vermont, y colegas, aparece en la edición del 16 de marzo de la Journal of the American Medical Association. Fue financiado en parte por el Instituto Nacional del Envejecimiento.

Los investigadores analizaron los registros de casi 5.2 millones de estadounidenses de 65 años o más que recibieron los beneficios del programa de pago por servicio de Medicare en 2007. En particular, se examinaron los datos de los diagnósticos de nueve enfermedades crónicas graves: cáncer, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, enfermedad coronaria, insuficiencia cardiaca congestiva, enfermedad arterial periférica, enfermedad hepática grave, diabetes con enfermedad de órganos diana, insuficiencia renal crónica y la demencia.

El número medio de afecciones de salud crónicas diagnosticadas fue de 8.7 por cada diez personas. Pero variaba de manera significativa en función de las 306 regiones de EE. UU. en que los pacientes buscaban atención.

En el extremo inferior, los pacientes de Grand Junction, Colorado y Idaho Falls, Idaho, fueron diagnosticados con 5.8 enfermedades crónicas por cada 10 personas, en comparación con más de 12 enfermedades por cada 10 personas en Miami y McAllen, Texas.

Como era de esperar, entre más afecciones crónicas tenía una persona, más probabilidades tenía de morir. La tasa de mortalidad de las personas que no tenían afecciones de salud crónicas fue de 16 por 1,000 al año; 45 por cada 1,000 para las personas que tenían una afección; y de 93 por 1,000 para las personas que tenían dos afecciones.

Sin embargo, paradójicamente, entre los subgrupos de pacientes de Medicare de las regiones en las que los pacientes tendían a recibir más diagnósticos, el riesgo de muerte por una enfermedad crónica había descendido.

Los pacientes se dividieron en quintiles (o quintas partes) en base a la frecuencia de los diagnósticos de esa región.

Entre los pacientes que tenían una afección crónica, 51 por cada 1,000 de los que estaban en el quintil más bajo de diagnóstico murieron, en comparación con apenas 38 por 1,000 en el quintil más alto. En cuanto a los pacientes diagnosticados con tres afecciones, 168 murieron en el quintil más bajo, en comparación con 137 por 1,000 en las regiones en las que las afecciones crónicas eran diagnosticadas más fácilmente.

Quizá se deba a que reciben mejor atención, destacó Wennberg. Pero lo más probable es que la verdadera razón sea que en las regiones de atención de la salud de "alta intensidad" los pacientes son más propensos a ser diagnosticados con una enfermedad crónica, aunque no sea especialmente grave o no estén realmente enfermos.

Los datos muestran que a medida que el número de diagnósticos aumenta, también lo hace el número de visitas médicas, el número de visitas a diferentes médicos y también se hacen más pruebas de imagen y análisis de laboratorio.

"Los médicos hacen un diagnóstico", señaló Wennberg. "Si consulta a muchos médicos, harán más diagnósticos".

Esto complica los esfuerzos para medir la calidad y eficacia de la atención, apuntó el Dr. Ashish Jha, profesor asociado de políticas de salud de la Facultad de salud pública de Harvard.

En un esfuerzo por mejorar la atención de la salud, hay un movimiento creciente para calificar a los médicos y hospitales en función del desempeño y vincular el pago al buen desempeño de los médicos.

Para ser justos, los sistemas de clasificación toman en cuenta por lo general qué tan enfermos están los pacientes para evitar penalizar a los médicos que atienden al grupo de personas más enfermas.

Pero investigaciones, como este estudio, demuestran que estos métodos pueden ser erróneos, ya que los que parecen tener más enfermedades crónicas en realidad pueden que no estén más enfermos que los que tienen menos enfermedades crónicas, y viceversa, apuntó.

En pocas palabras: un paciente diagnosticado con enfermedad cardiaca y diabetes estaría más enfermo que un paciente que tiene una sola afección, pero ser diagnosticado con ambas afecciones puede estar más relacionado con el lugar de residencia y el número de médicos visitados.

O tal vez una paciente se hace una radiografía y se sorprende al enterarse de que tiene una enfermedad pulmonar leve. Si viviera en otra región en la que la atención de la salud fuera de menor intensidad, quizá nunca se haría la radiografía y se sentiría bien y nunca se enteraría de que tiene una enfermedad pulmonar.

Pero si a los médicos de la región de alta intensidad "se les da crédito" por tener un paciente más enfermo debido al diagnóstico de la enfermedad crónica, puede parecer que están realizando un mejor trabajo cuando en realidad no es así.

"Este estudio es realmente importante y un hallazgo muy significativo", señaló Jha. "Si usted es un médico muy bueno, pero no ordena la realización de muchas pruebas médicas podría parecer como si sus pacientes no estuvieran tan enfermos y por lo tanto sus resultados podría ser peores. Obviamente, lo último que queremos hacer es penalizar a los médicos por ser cautos y prudentes y no tener un gasto excesivo en pruebas y estudios de imagen o ser demasiado agresivos".

Una posible solución es aumentar el uso de registros médicos electrónicos, que permitirá que las historias clínicas sean analizadas más fácilmente al hacer un ajuste del riesgo, apuntó Jha. En la actualidad, debido a que tantos médicos siguen utilizando los registros en papel, el ajuste del riesgo se hace mediante los datos de las reclamaciones del seguro, una información que está incompleta y que no entra mucho en detalle con respecto a qué tan enfermos están los pacientes en realidad.

"Queremos estar en capacidad de diferenciar entre los pacientes que están realmente enfermos por una enfermedad pulmonar y quien tenga una afección de menor importancia, pero que está por lo demás bien", apuntó Jha. "Esta información no se consigue a través de las reclamaciones ni los datos de las facturas, pero sí de registros clínicos y de un mayor uso de los registros de salud electrónicos".

Más información

Para más información sobre la atención de enfermedades crónicas, visite a la Agencia para la Investigación de la Atención Médica.


Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor

Related Stories

No stories found.
logo
Healthday Spanish
spanish.healthday.com