MIÉRCOLES, 2 de abril (HealthDay News) -- Para los niños estadounidenses, el lugar donde han nacido y se han criado tiene una función fundamental en sus probabilidades de mantenerse saludables en la edad adulta, según sugiere un informe reciente.
El informe, Geography Matters: Child Well-Being in the States, elaborado por el Every Child Matters Education Fund, clasifica cada estado según lo bien que cuida de sus niños.
"Existe una gran diferencia entre los estados en una amplia variedad de indicadores de bienestar infantil, especialmente entre los mejores y peores estados", dijo durante una teleconferencia Michael R. Petit, fundador de Every Child Matters y autor del informe.
"El estado donde vivan los niños estadounidenses no debería afectar negativamente sus probabilidades de vivir, pero así es", dijo Petit. ¿Cómo es posible que un niño pobre de Vermont lleve una vida completamente diferente a la de un niño en las mismas condiciones de Luisiana? No debería ser políticamente aceptable que se permitieran o simplemente se ignoraran las amplias diferencias en la probabilidad de vida de los niños".
Cerca de 13 millones de niños estadounidenses viven en la pobreza, añadió Petit. "Más de ocho millones no tienen seguro médico. Cada año, cerca de tres millones son abusados y descuidados", continuó.
El informe repasa las diez medidas conocidas más comunes de bienestar infantil, explicó Petit. La mayoría de la información se ha obtenido de fuentes gubernamentales y compara los diez mejores estados con los diez peores.
Por ejemplo, los niños en el estado peor valorado, Luisiana, tienen el doble de posibilidades de morir en su primer año de vida que los niños que viven en Vermont, el estado mejor valorado.
Los niños de Luisiana tienen tres veces más posibilidades de morir entre sus primeros 14 años de vida y tres veces más posibilidades de morir entre los 15 y los 19, en comparación con los niños de Vermont.
Los niños de Luisiana tienen el triple de posibilidades de nacer de una madre adolescente y cinco veces más posibilidades de tener madres que no reciban cuidado prenatal o que lo reciban tarde, comparados con los niños de Vermont.
Además, los niños de Luisiana tienen más probabilidades de vivir en la pobreza y sin seguro médico que los niños de Vermont. Los niños de Luisiana tienen ocho veces más probabilidades de pasar por la cárcel y trece veces más probabilidades de morir por abusos y descuido, según el informe.
Los diez estados que se sitúan al final de la lista son: Arizona (41); Dakota del Sur (42); Nevada (43); Arkansas (44); Carolina del Sur (45); Texas (46); Oklahoma (47); Nuevo México (48); Misisipí (49); y Luisiana (50).
Los diez estados que ocupan los primeros lugares son: Vermont (1); Massachusetts (2); Connecticut (3); Rhode Island (4); New Hampshire (5); Hawai (6); Iowa (7); Minnesota (8); Washington (9); y Maine (10).
Otros hallazgos claves contenidos en el informe son:
Según el informe, varios son los factores que desempeñan un papel importante en la disparidad entre los estados. Entre estos se incluye la cultura política, donde los estados en los niveles inferiores tienden a ver el papel del gobierno en aspectos sociales como limitado. Estos estados tienen, por lo general, menores tasas de impuestos, por lo que hay menos inversión en programas para la infancia.
A nivel federal, los programas para el cuidado de la salud infantil, el abuso infantil y la pobreza han ido disminuyendo a medida que el dinero procedente del gobierno ha ido recortándose. Se espera que la financiación federal se reduzca aún más en los próximos diez años, advierte el informe. El gasto federal en los niños ha descendido desde un 20% del gasto nacional en los años 60 hasta un 15% en 2005, añade Petit.
Un experto está de acuerdo en que la disparidad que sufren los niños en Estados Unidos es un asunto de preocupación que necesita abordarse.
"La acusada variabilidad en la mortalidad infantil entre los estados sugiere que estamos siendo demasiado tolerantes en las diferencias en cuanto a la seguridad financiera, la educación y los servicios sociales", señaló el Dr. David L. Katz, director del Centro de Investigación de Prevención de la Facultad de Medicina de la Universidad de Yale.
"Aunque parece poco probable que nuestra sociedad elimine todas las diferencias sociales, aquéllas que afectan la supervivencia de los niños necesitan una atención especial", dijo Katz. "Una comparación sistemática de los programas y políticas entre los diferentes estados es un buen comienzo para cerrar la brecha que indica que no somos una sola nación, para todos, como decimos ser".
El Every Child Matters Education Fund es una organización sin fines de lucro que pretende hacer de las necesidades de los niños una prioridad política nacional y que promueve la adopción de políticas inteligentes para los niños y sus familias, como la desaparición del abuso infantil, ayudar a los padres trabajadores en el cuidado de los hijos, ampliar los programas de educación preescolar y extraescolar y asegurar que los niños reciben un buen cuidado de la salud.
Más información
Para leer el informe completo, visite Every Child Matters Education Fund.
