LUNES, 24 de agosto de 2020 (HealthDay News) -- La pandemia del coronavirus ha planteado unos problemas significativos para las personas con trastornos de la alimentación, encuentra un estudio reciente.
Durante las etapas iniciales del confinamiento por la pandemia en Reino Unido, los investigadores de la Universidad de Northumbria, en Newcastle, encuestaron a personas que tenían actualmente un trastorno de la alimentación, o que se estaban recuperando de uno.
En total, un 87 por ciento de los encuestados dijeron que sus síntomas habían empeorado debido a las alteraciones de la vida diaria relacionadas con el confinamiento, y más de un 30 por ciento dijeron que sus síntomas eran mucho peores.
Los impactos nocivos en la salud mental incluyeron una reducción en la sensación de control, un mayor aislamiento social, más pensamientos sobre una alimentación alterada, y una falta de respaldo social, según el informe, que se publicó en la edición en línea del 24 de agosto de la revista Journal of Eating Disorders.
Los efectos negativos de la pandemia podrían deberse a cambios en la rutina regular, la situación vital, el tiempo que se pasa con los amigos y la familia, el acceso al tratamiento, la actividad física, la relación con la comida y el uso de la tecnología, según las autoras del estudio, Dawn Branley-Bell y Catherine Talbot.
Las alteraciones en la atención fueron un problema importante entre los participantes en la encuesta. Algunos dijeron que les dieron de alta de forma prematura de las unidades de pacientes internos, que su tratamiento se suspendió o que seguían en una lista de espera para el tratamiento. Algunos aseguraron que habían recibido un respaldo limitado tras su diagnóstico con un trastorno de la alimentación.
Como resultado, algunos participantes comentaron que se sentían como una "carga" y que habían sido "olvidados" por el gobierno de Reino Unido y el Servicio Nacional de Salud (NHS), anotaron los autores del estudio en un comunicado de prensa de la universidad.
Alrededor de 1.25 millones de personas de Reino Unido tienen un trastorno de la alimentación (como la anorexia, la bulimia o un trastorno por atracones), según Beat, una organización caritativa nacional. Antes, se sabía poco sobre cómo la pandemia ha afectado a estos pacientes, señalaron los investigadores.
Los expertos han hecho un llamamiento a que se realice investigación sobre las consecuencias de salud mental de la pandemia en los grupos vulnerables, por ejemplo las personas mayores y las que tienen afecciones graves de la salud mental, entre ellas los trastornos de la alimentación.
Los autores del estudio añadieron que los hallazgos podrían aumentar la concienciación y ayudar a orientar la atención de las personas con trastornos de la alimentación durante la pandemia.
Más información
El Instituto Nacional de la Salud Mental de EE. UU. ofrece más información sobre los trastornos de la alimentación.
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