(HealthDayNews) -- Las madres que lactan deben evitar ingerir alcohol, aconseja Colegio de Medicina Baylor en Houston. El alcohol pasa fácilmente a la leche materna y tomadoras fuertes o una bebida diaria puede perjudicar al bebé.
El cuerpo de un bebé asimila el alcohol muy lentamente, de manera que una pequeña cantidad puede afectar la alimentación y los patrones de sueño. Exposición regular al alcohol puede también afectar la coordinación y el comportamiento de un bebé.
Si te dan deseos de beber, puedes limitarte a una ocasional copa de vino de tres onzas, luego espera dos horas o más antes de alimentar a tu bebé. De esta forma, tu cuerpo podrá eliminar el alcohol de la sangre y de la leche.
