No deje que las dolorosas ampollas arruinen su diversión de verano

SÁBADO, 16 de julio de 2016 (HealthDay News) -- Quizá crea que las ampollas son unas dolorosas molestias de los pies, pero un experto advierte que pueden aparecer en cualquier lugar en la piel que roce con la ropa u otra parte del cuerpo.

La buena noticia es que las ampollas se pueden evitar al prevenir los roces.

"En el caso de las ampollas, la prevención es de verdad la clave", afirmó el Dr. Anthony Rossi, profesor asistente de dermatología del Centro Oncológico Conmemorativo Sloan Kettering, en la ciudad de Nueva York.

"Para detenerlas antes de que aparezcan, preste atención a la piel y tome precauciones si sabe que va a caminar o a correr mucho, o hacer otro tipo de actividad física durante un buen rato", dijo en un comunicado de prensa de la Academia Americana de Dermatología (American Academy of Dermatology).

Rossi ofrece los siguientes consejos:

• Use calcetines. Pruebe con calcetines de nylon y transpirables, y póngase un par adicional de calcetines si uno solo no es suficiente. Evite el calzado que le quede demasiado apretado o demasiado flojo.
• Cuando esté activo, use ropa transpirable y floja. Tenga cuidado con la ropa de algodón, que puede provocar fricción a medida que se empapa de sudor y humedad.
• Los vendajes suaves, como el molesquín adhesivo, pueden proteger las áreas vulnerables de los pies y los muslos. Aplíqueselo con firmeza para evitar más problemas.
• Para prevenir la fricción, úntese polvo o vaselina.
• Si siente dolor o su piel enrojece, pare la actividad física.

"Si le sale una ampolla, sea paciente e intente dejarla tranquila", planteó Rossi. "La mayoría de las ampollas se sanan solas en una a dos semanas. No vuelva a realizar la actividad que provocó la ampolla hasta que sane".

Mientras tanto:

• Cubra la ampolla con un vendaje flojo, levantándolo un poco por el medio. También piense en añadir relleno para proteger las ampollas en lugares como la parte inferior del pie. Recorte el relleno en forma de rosquilla y colóquelo alrededor de la ampolla.
• No reviente ni drene una ampolla a menos que sea grande y le duela. Si debe drenarla, use una pequeña aguja esterilizada con alcohol para abrir el borde de la ampolla, no la parte superior.
• Mantenga el área de la ampolla limpia y cubierta. Lávela con jabón y agua después de que se drene, y cúbrala con vaselina.

"A medida que la ampolla sane, vigile si hay señales de una infección", aconsejó Rossi. "Si nota cualquier enrojecimiento, pus o un aumento en el dolor o la inflamación, pida una cita con su médico o con un dermatólogo certificado por la junta".

Más información

Para más información sobre el cuidado de las ampollas, visite la Clínica Mayo.

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