MIÉRCOLES, 21 de octubre de 2020 (HealthDay News) -- Uno de los motivos por los cuales las mujeres quizá sean menos vulnerables a la COVID-19 es porque son más propensas a cumplir las políticas de distanciamiento social, sugiere una nueva encuesta.
Una encuesta realizada en ocho países en marzo y abril encontró unas diferencias sustanciales entre los sexos, tanto en la cantidad de personas que consideraban que la COVID-19 era una crisis de salud grave como en la cantidad que se mostraban de acuerdo con las políticas públicas para ayudar a combatir a la pandemia.
Por ejemplo, en marzo, un 59 por ciento de las mujeres consideraban que el virus era un problema de salud grave, mientras que apenas un 49 por ciento de los hombres opinaban lo mismo. Las mujeres también estaban por delante de los hombres en cuanto a la aceptación de las políticas públicas y su seguimiento.
Aunque la cantidad de personas que cumplían las normas se redujo con el tiempo, sobre todo en Alemania, la diferencia entre los sexos persistió, encontraron los investigadores.
El estudio aparece en la edición del 15 de octubre de la revista Proceedings of the National Academy of Sciences. Dos de los autores del estudio, Vincenzo Galasso y Paola Profeta, están afiliados con el Laboratorio de la Crisis de la COVID de la Universidad de Bocconi, en Milán, Italia.
"Las mayores diferencias entre los hombres y las mujeres se relacionan con las conductas que sirven sobre todo para proteger a los demás, como toser en el codo, a diferencia de las que pueden proteger tanto a la persona misma como a los demás", comentó Profeta en un comunicado de prensa de la universidad.
La encuesta, que abarcó a dos olas, se realizó en Australia, Austria, Francia, Alemania, Italia, Nueva Zelanda, Reino Unido y Estados Unidos, y respondieron casi 22,000 personas.
Las diferencias entre los hombres y las mujeres fueron más pequeñas entre las parejas casadas, además de los individuos con la exposición más directa a la pandemia. Se redujeron a lo largo del tiempo si los hombres y las mujeres se exponían al mismo flujo de información.
Galasso sugirió que "los legisladores que promueven una nueva normalidad conformada por una reducción en la movilidad, las máscaras faciales y otros cambios conductuales deben, por tanto, diseñar una comunicación distinta según el sexo si desean aumentar el cumplimiento entre los hombres".
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Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. ofrecen más información sobre el nuevo coronavirus.
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