DOMINGO, 4 de marzo (HealthDay News) -- A los asmáticos les va mejor en un tipo de prueba para las alergias alimentarias llamada "provocación alimentaria" que a los no asmáticos, sugiere una investigación reciente.
La provocación alimentaria conlleva que las personas que se sospecha que sufren de una alergia alimentaria consuman cantidades pequeñas de un alimento oralmente para ver si presentan una reacción alérgica. Si no hay reacción, la persona come cantidades crecientes del alimento para determinar si pueden consumirlo con seguridad.
En el estudio, investigadores del Colegio Médico de Wisconsin y del Hospital Pediátrico de Wisconsin revisaron los expedientes de 105 pacientes de alergias alimentarias entre los 9 meses y los 74 años de edad. Unas tres cuartas partes de los pacientes sufrían de asma.
Alrededor del 21 por ciento de los que no sufrían de asma fracasaron en las provocaciones alimentarias, o sea que tuvieron una reacción como urticaria, tos o sibilancia tras ser expuestos al alimento. Menos del 13 por ciento de los pacientes asmáticos fallaron en la provocación alimentaria.
"Un diagnóstico de asma no se asoció con una mayor tasa de fracaso en la provocación alimentaria, lo que sugiere que las provocaciones alimentarias se deben fomentar en esta población", apuntó en un comunicado de prensa de la Academia Americana de Alergias, Asma e Inmunología (American Academy of Allergy, Asthma and Immunology, AAAAI) la autora principal del estudio, la Dra. Monica Vasudev.
El estudio fue presentado el 4 de marzo en la reunión anual de la AAAAI en Orlando, Florida. Los datos y las conclusiones deben considerarse como preliminares hasta que se publiquen en una revista reseñada por profesionales.
Los autores del estudio anotaron que médicos y pacientes podrían preocuparse de que tener asma signifique tener un riesgo elevado de reacciones alérgicas.
"Deseábamos revisar los resultados de las provocaciones alimentarias porque la tendencia podría ser a evitarlas debido a la preocupación sobre una reacción, y esto es especialmente así en los pacientes con antecedentes de asma", señaló en el comunicado de prensa la primera autora del estudio Carrie Lee.
Añadió que las provocaciones alimentarias "siempre se deben realizar bajo atención médica supervisada y mediante el uso de un protocolo establecido".
Más información
La Food Allergy Initiative ofrece más información sobre las alergias alimentarias.
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