¿Será buena la recesión para su salud?

Estudio señala que la esperanza de vida aumentó durante la Gran Depresión

MARTES, 29 de septiembre (HealthDay News/DrTango) -- La recesión podría no ser del todo mala. De hecho, investigadores estadounidenses señalan que las recesiones en realidad podrían ser buenas para la salud.

Los investigadores de la Universidad de Michigan examinaron los índices de mortalidad durante la Gran Depresión, la peor crisis económica del s.XX. Desde la caída de la bolsa en 1929 hasta comienzos de los treinta, la actividad económica se redujo sustancialmente bajó un catorce por ciento en 1932, a la vez que el desempleo alcanzó el 22.9 por ciento el mismo año.

Las imágenes en blanco y negro de la era de las filas para recibir comida gratis y de campesinos migrantes hacen que sea fácil suponer que la miseria económica habría afectado la salud pública.

Sin embargo, cuando los investigadores examinaron los índices de mortalidad entre hombres, mujeres y niños entre 1920 y 1940, hallaron que los índices de mortalidad se habían reducido durante los años en los que la actividad económica estuvo reducida y aumentó cuando los tiempos mejoraron.

El estudio aparece en la edición en línea del 28 de septiembre de Proceedings of the National Academy of Sciences.

Durante las dos décadas que van de los veinte a los treinta, la esperanza de vida general aumentó en 8.8 años. Sin embargo, el aumento no fue constante sino que aumentó vertiginosamente y volvió a caer en un patrón que se correlacionó con el aumento y la caída de la actividad económica.

Entre 1921 y 1926, los llamados "locos años veinte" y un tiempo de crecimiento económico robusto, la esperanza de vida de los hombres que no eran blancos se redujo en 8.1 años. Aún así, entre 1929 y 1933, los años de decadencia económica más marcada, su esperanza de vida aumentó de manera similar.

De igual manera, las mujeres que no eran blancas perdieron 7.4 años de esperanza de vida durante los locos veinte, pero aumentaron 8.2 durante la Depresión.

Para los blancos, el patrón fue similar, aunque la pérdida de la esperanza de vida no fue tan marcada como para los que no eran blancos.

"El hallazgo básico del artículo es que los índices de mortalidad tienden a evolucionar paralelamente con la economía", señaló Jose Tapia Granados, científico investigador asistente del Instituto de investigación social de la Universidad de Michigan. "Cuando la economía repunta, la mortalidad también. Cuando la economía cae, la mortalidad también".

Los investigadores hallaron una excepción. Durante los veinte y los treinta, las dos terceras partes de las muertes fueron causadas por enfermedades renales y cardiovasculares, cáncer, influenza y neumonía, tuberculosis, accidentes automovilísticos, y suicidio.

Todos se hicieron menos mortales durante los tiempos económicos difíciles, con excepción de los suicidios. Sin embargo, los autores del estudio agregaron que los suicidios correspondieron a menos del dos por ciento de las muertes, cosa insuficiente para alterar la tendencia general.

El país comenzó a salir de la Gran Depresión en 1933. La economía creció en más de diez por ciento anual entre 1933 y 1936. De nuevo, la mortalidad alcanzó un pico en 1936, cuatro años después del peor año de la Depresión, incluso para los niños menores de cuatro años.

Los investigadores anotaron que el marcado aumento de las muertes en 1936 no se puede atribuir a la demora. Las muertes por accidentes automovilísticos aumentaron, cosa que no se vería afectada por el retraso.

Entonces, ¿por qué habría de ser malo para la salud el retorno de los buenos tiempos?

La teoría de los investigadores es que más actividad económica implica que la gente tiene dinero para conducir, lo que implica que más mueren en accidentes vehiculares. En los veinte y los treinta, los automóviles se convirtieron en artículos de consumo masivo.

A medida que aumenta el uso de vehículos automotores, la contaminación también. Estudios recientes han relacionado la materia particulada de automóviles y camiones, y el monóxido de carbono con ataques cardiacos y accidentes cerebrovasculares.

Durante los períodos de crecimiento, la gente tiene más dinero para gastar en alcohol y cigarrillos. Además, más actividad económica implica más pedidos a las fábricas, lo que significa que la gente está trabajando más intensamente y más tiempo, y que está durmiendo menos.

Aún así, esto no significa que perder el empleo sea bueno para la salud. El estudio contempla el panorama general, menos automóviles, menos gente trabajando tiempo extra, menos contaminación, y cómo podría beneficiar la salud pública en general.

Podría haber un patrón similar durante la depresión actual, según sugirieron los autores.

"Pronostico que los índices de mortalidad de 2008 serán más bajos que en 2007 y probablemente más bajos en 2009 que en 2008", aseguró Tapia. "Hay una mejora general, aunque los suicidios están aumentando".

Joshua Klapow, profesor asociado de la facultad de salud pública Birmingham de la Universidad de Alabama, aseguró que tendría cuidado a la hora de aplicar cualquiera de estos hallazgos a la recesión actual.

La sociedad ha cambiado significativamente durante los últimos sesenta a ochenta años, dijo. Los avances médicos le permiten a la gente vivir con enfermedades crónicas por más tiempo en estos días. Las enfermedades infecciosas, como la tuberculosis, matan menos gente hoy. Menos gente hace trabajo manual, el tabaquismo se ha reducido y la obesidad ha aumentado sustancialmente.

"Los únicos puntos similares son los factores económicos", aseguró Klapow. "No se pueden comparar el estado de salud, la atención de la salud ni los estilos de vida con los de los veinte o los treinta. Hay factores desconcertantes actualmente que no nos permiten sacar conclusiones razonables acerca del estado actual".

Además, durante esta depresión, los estudios señalan que muchos estadounidenses están tomando decisiones de salud inadecuadas, como reducir sus medicamentos y dejar de ir al médico por el costo.

"Tenemos muchos indicadores durante esta crisis de que el estado de salud de la población no está mejorando", advirtió Klapow. "El estudio es fascinante, pero necesitamos tener mucho cuidado de no predecir una trayectoria hasta nuestros días".

Más información

La Biblioteca y Museo Presidencial Herbert Hoover tiene más información sobre la Gran Depresión.


Artículo por HealthDay, traducido por DrTango

Related Stories

No stories found.
logo
Healthday Spanish
spanish.healthday.com